martes, 7 de octubre de 2008

ESTRENANDO ALAS

Se me había olvidado que tenía alas y que las podía usar para volar, para escapar, para tocar el cielo. Las volví a encontrar, estaban ahí, escondidas debajo de mis miedos y mis convicciones, logré escarbar y pude volar, lejos, muy lejos, como nunca.

Me siento bien, me siento tranquilo, volé hasta un lugar que me mostró la realidad del amor en nuestras vidas. Las lágrimas que derramé se fueron con las lluvias de octubre, a pocos días de mi santo sólo puedo pedir ser feliz y correspondido.

Y suena mucho...

Gimme gimme gimme (a man after midnight). Abba.

1 comentario:

Madame Curie dijo...

Yo entiendo, el problema a veces es que uno se encarta con las alas... no sabe que hacer y buena por lados donde no se debe.

Te mando besos!